Monumentos históricos más visitados de Galicia
Los eslóganes «Galicia vuelve», «Galicia, el buen camino» o «descubre Galicia» han impulsado con éxito el turismo en esta CC.AA en las últimas décadas. A decir verdad, los mercadólogos lo tienen aquí más fácil que en otros destinos gracias a la abundancia de monumentos históricos que atraen al visitante.
Con diferencia, el faro de Finisterre encabeza la lista de los más visitados. Erigido a mediados del siglo XIX, esta construcción se alza en uno de los puntos más occidentales de Europa, justo donde los antiguos romanos juzgaron que se ubicaba el confín de la tierra. Su panorámica del océano Atlántico cautiva a los turistas, siendo habitual encontrarlos tomándose fotos y selfies.
Que el Día de Galicia (15 de julio) coincida con el comienzo de las fiestas del Apóstol Santiago demuestra la importancia de esta figura en Galicia. Uno de los muchos monumentos dedicados a Santiago es la catedral que lleva su nombre. Se ubica en Santiago de Compostela, y se estima que ocho millones de personas la visitan al año.
De todos los hórreos que se reparten por la geografía gallega, el de Carnota se distingue del resto por su longitud: más de treinta metros de largo, siendo el mayor de su género. Su trascendencia histórica y cultural impulsaron la declaración de este hórreo del municipio de Rianxo en ‘Monumento Nacional’.
Por su parte, la Torre de Hércules se enorgullece de ser el faro en activo más longevo del mundo, con dos mil años de uso. Incluso la Unesco reconoce su valor patrimonial. Las estimaciones sugieren que dos millones de turistas visitan al año este icono romano, situado en la entrada al puerto de A Coruña
De mayor antigüedad si cabe es el castro de Baroña, ubicado en el municipio de Puerto del Son. Se remontan a la Edad de Hierro y está formado por vestigios de murallas y viviendas de aquel periodo.