5 denominaciones de origen de vinos gallegos

D.O. Rías Baixas: Es, sin duda, la más conocida de todos los vinos gallegos. Es importante señalar que no existe la denominación de origen albariño, que se trata de un tipo de uva con la que se elaboran vinos que suelen estar bajo la denominación de Rías Baixas. La cuna del albariño está en Cambados, en Pontevedra, y para muchos es el mejor de los vinos blancos gallegos e incluso uno de los mejores a nivel mundial. Los vinos blancos de las Rías Baixas son los más conocidos, aunque hay otras variedades. 

D.O. Ribeiro: Tiene su centro en Ribadavia, una histórica villa gallega. Es la denominación de origen más antigua de toda Galicia y sus vinos son, principalmente, blancos. Son vinos ligeros, frescos y con bastante acidez. Suelen tener una marcada personalidad ya que suelen llevar variedades de uva propias de la zona de elaboración que le dan a cada tipo de Ribeiro un sabor inconfundible.

D.O. Valdeorras: Esta comarca, que también tiene su parte leonesa, es otra de las zonas de gran tradición vinícola ya desde tiempos de los romanos. Actualmente, el más demandado entre los vinos blancos es la variedad Godello, mientras que si se prefieren tintos, los de Mencía son los que cuentan con más pedidos. Normalmente, son vinos con un sabor intenso, especialmente los tintos.

1. O. Ribeira Sacra: Esta zona bebe de la tradición de los monjes que ocuparon toda la ribera y que se dedicaron durante muchas décadas a la producción de vinos. Las uvas se cultivan en terrazas y gargantas de una gran belleza, que es posible contemplar en diferentes rutas, algunas de ellas realizadas en barco por el río Sil. La mayoría de los vinos de Ribeira Sacra son tintos y se elaboran con una gran variedad de uvas, que dan lugar a diferentes tipos de vino, todos ellos de acusado sabor.

D.O. Monterrei: Esta denominación de origen es muy nueva, de finales del siglo pasado, por lo que tiene una trayectoria que no llega todavía a las tres décadas. Tiene su centro en la zona de Verín y cuenta con una gran tradición en la antigüedad pero que había sido dejada de lado durante décadas. Ahora, se ha recuperado la zona y está luchando por hacerse con un lugar en las bodegas de los mejores restaurantes, tanto en sus variedades de vinos blancos como tintos.