Coche particular en ciudad…no gracias

¿Te has preguntado alguna vez por qué deberías recurrir a parkings Cordoba en lugar de conducir por el centro de la ciudad? ¿O por qué hacer lo mismo en cualquier otra ciudad por la que te desplaces? Son varias las razones para hacerlo, especialmente cuando no conoces el lugar al que vas a ir.

Para empezar, al desconocer la ciudad no sabes qué calles son peatonales, cuáles de una única dirección etc. El uso del GPS es una ayuda pero todos sabemos que no siempre están actualizados y que pueden llevar a error, además de tener que atender a las indicaciones del teléfono a la par que te mueves por un lugar que no conoces, lo que puede hacer que acabes despistándote. Por no hablar de que en algunas ciudades no pueden entrar todos los coches.

Otra razón es que el centro de las ciudades suele ser un espacio en el que hay negocios y por tanto muchos coches de profesionales que están haciendo carga y descarga, no siempre en los lugares indicados ya sea porque no los han respetado otros coches o porque por rapidez y comodidad paren delante de la puerta del lugar en el que van a dejar el encargo. Todo esto hace que tengas que detenerte y esperar ya que hay tramos en los que es complicado adelantar. En cualquier caso, el estrés está servido.

Pero, además, el centro de una ciudad suele ser el lugar en el que más cosas hay para ver, sobre todo cuando se dispone de un centro antiguo en el que se pueden ver monumentos y edificios emblemáticos. Por todo esto, no es lógico hacer el recorrido en coche, sino andando para disfrutarlo al máximo y poder detenerse a mirar aquello que nos apetece ver con calma o fotografiar. Incluso parar en una tienda típica a comprar algo o a tomar un café y un dulce de la zona.

Y por último pero no menos importante, está el hecho de que el centro de las ciudades suele ser el lugar más contaminado de todos. Por ese motivo hay que ser lo más solidario posible y no usar el coche en los centros urbanos a no ser que sea necesario. Moverse caminando o en transporte público ayuda a que estos espacios se humanicen y se vuelvan más agradables para todos, por lo que debemos de poner nuestro granito de arena para evitar malos humos.