Cómo moverse por Alicante de manera eficaz

La movilidad urbana es una de las mayores fortalezas de Alicante, y de ella dan fe los viajeros que descubren esta ciudad levantina por primera vez. A la red vial disponible se suman las líneas de autobús y de tren, los tranvías o la oferta de taxis, que proporcionan acceso a los principales enclaves de Alicante.

 

En primer lugar, desplazarse en coche es una opción preferencial. La generosa oferta de parkings en Alicante centro gratuitos y de pago permite estacionar en las inmediaciones de cualquier destino. Las plazas de la zona azul están abiertas al público general durante un máximo de dos o cinco horas, dependiendo del tipo de aparcamiento, mientras que las de zona naranja se destinan en principio a los residentes, si bien los visitantes pueden utilizarse con una serie de condiciones.

 

Para librarse de la problemática que plantea a veces el coche particular, se recomienda moverse en autobús urbano, el medio de transporte más utilizado en Alicante por la comunicación y precio asequible de sus líneas. El público turista puede beneficiarse de la tarjeta Alicante Tourist Card, pensada para los viajeros que deseen desplazarse múltiples veces sin agotar su presupuesto.

 

Por su parte, los trenes de cercanía disponen aquí de varias líneas que comunican la capital con los municipios adyacentes. Son las líneas C-3 Alicante-San Vicente Centro, C-2 Murcia-Águilas y C-1 Murcia-Alicante. Cada billete de ida y de vuelta tiene un precio de 2,40 euros en la fecha actual, una tarifa económica.

 

Dentro de Alicante, los tranvías que recurren regularmente las líneas L1, L2, L3, L4, L5 y L9 permiten acceder a los puntos de interés de la capital. Destinos tan populares como Calpe, Benidorm o Denia está al alcance de todos los viajeros en este cómodo y asequible transporte. Como alternativa, los taxis proporcionan un medio rápido y eficaz para llegar a cualquier enclave.